Una vez que hemos visto y comprendido el vídeo titulado “Cambio de Paradigma en la escuela” de Ken Robinson; me gustaría destacar varios aspectos sobre el mismo que creo que hay que tener en cuenta.
En primer lugar hace referencia a que los países, en general, cambian su sistema educativo conforme a las nuevas necesidades y demandas de la sociedad, pero para llevar a cabo esto nos basamos en el sistema antiguo. Y por esto, los alumnos no piensan ni apoyan que haya que seguir este modelo tan arcaico pero tan actual a la vez. Se enfatiza en que el sistema educativo actual fue diseñado en la Ilustración, poniendo en práctica sus ideas y teniendo en cuenta la situación económica de la época como la Revolución Industrial. Nació la escuela pública como idea revolucionaria, y por tanto reprendida por las clases altas.
Por otra parte, quisiera hacer referencia a que la verdadera inteligencia solo consiste en nuestras capacidades de razonamiento deductivo. Y ante esto, hay dos tipos de personas, las que son inteligentes de verdad y las que han sido educadas pero de forma sistemática.
También me gustaría hacer referencia al inconveniente de la estandarización, y para preverlo hay que mostrar una actitud totalmente opuesta a ella. Ken Robinson nos dice que el pensamiento divergente es totalmente diferente a lo que puede ser la creatividad. Por un lado define la creatividad como aquella capacidad de tener ideas originales que tengan valor; y por otro lado, el pensamiento divergente es una herramienta primordial para la creatividad. Para poner un ejemplo, ante la pregunta ¿cuántas utilidades se te ocurren para un sujetapapeles?, la gente “normal” podría decir de 10 a 15, mientras que un genio nos podría decir hasta 200. Otra situación sobre esto es cuando se entregó un test para medir el pensamiento divergente a 1500 niños de infantil, y de todos ellos, el 90% obtuvo el nivel de genio. Cinco años más tarde, cuando estos niños tenían de 8 a 10 años y se les hizo ese mismo test al igual que cuando tenían la edad de de 13 a 15 años, los resultados finales nos decían que todos tenemos la capacidad de pensamiento divergente y que en la mayoría de los casos se va deteriorando. Y este deterioro es producido por la escuela y su modo de enseñanza, es decir, de fomentar un aprendizaje memorístico.
Descubrimos, en consecuencia, que los niños pasan unos diez años en la escuela y se les influye de una manera donde se les dice que hay una respuesta sin decir por qué ni indagar en ella. Sin embargo, la mayor parte del aprendizaje se produce cuando hay colaboración entre grupos y esta es la fuente de crecimiento.
